CONSECUENCIAS DE NO INNOVAR EN SEMILLAS EN EL CULTIVO DE ALGODÓN EN ARGENTINA

Autores: Ing. Pablo Vaquero - Lic. Alejandro Fried

Lentamente ha comenzado un nuevo modelo de producción algodonera que se caracteriza por grandes extensiones, productores tecnificados, inversión en nuevas cosechadoras, desmotadoras y mejoras de las condiciones de competitividad de las provincias involucradas, todo esto en el marco de una nueva política algodonera nacional (sanidad + genética + trazabilidad y calidad de fibra) y de cambios en el escenario internacional.

El mejoramiento genético es uno de los grandes desafíos del sector. Argentina tiene un atraso de al menos dos generaciones en tecnologías, ya que desde hace más de diez años no hay nuevos eventos biotecnológicos y desde hace cinco que no se lanza una nueva variedad comercial al mercado.

En el presente trabajo, se consideraron dos escenarios para Argentina, uno suponiendo un débil respeto a la propiedad intelectual cuya consecuencia será una muy baja adopción de nuevas tecnologías en semillas y por ende un sendero decreciente en los rendimientos (status quo) y un segundo, que contempla una adopción progresiva de mejores variedades y eventos biotecnológicos que vayan acercando al país a los que tienen los países competidores producto de un mayor respeto a la propiedad intelectual e innovación en semillas (virtuoso) (…). La experiencia internacional muestra que el trabajo articulado de toda la cadena algodonera, el respeto a la propiedad intelectual y el desarrollo de una política de largo plazo son los drivers estratégicos para la sustentabilidad del algodón.

Datos del estudio en infografías

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Videos: Estación Experimental Roque Saenz Peña, INTA Argentina, Chaco: la ciencia y el conocimiento detrás del capullo

En la localidad de Roque Sáenz Peña en la provincia de Chaco, Argentina, profesionales de INTA trabajan en el mejoramiento genético de algodón. Conformado por biotecnólogos, ingenieros agrónomos, entomólogos, fitopatólogos, licenciados en ciencias biológicas, entre otras especialidades, este equipo de hombres y mujeres desarrolla variedades de algodón adaptadas al cambio climático y resistentes a plagas y enfermedades. Lo hacen mediante diversas técnicas de mejoramiento genético, mantienen un banco de germoplasma y buscan combatir una de las plagas más desafiantes de este cultivo: el picudo algodonero.

- Ver artículo sobre el "Picudo Algodonero"