Alta en el cielo: Una historia de amor e innovación celeste y blanca

Desde las estrofas de Aurora, la canción más entonada en honor a la bandera, hasta la tela que orgullosamente ondea en cada mástil o preside una ceremonia; pasando por los campos argentinos donde también flamea, la bandera nacional tiene una historia de amor e innovación. 

¿Por qué Aurora?

Quizás Aurora sea la canción más emblemática que hemos cantado y cantaremos en Argentina para homenajear a nuestro pabellón nacional. Pero a la par que entonamos “alta en el cielo, un águila guerrera…”, estrofas que poco tienen que ver con la aurora o el amanecer de un nuevo día, desconocemos que su origen está en una ópera de 1908.

La obra narra la historia de un joven patriota enamorado de la hija de un jefe del ejército Realista, Aurora. La noche del estreno, en el teatro Colón, el coro impresionó a todos los asistentes que le pidieron al tenor que repitiera el aria; situación muy pocas veces vista en este tipo de representaciones. La canción “pegó” pero al estar en italiano (las óperas se cantan en italiano) no llegaba al gran público y fue por eso que su autor, Héctor Panizza, junto a Ángel Petitta y Josué Quesada la tradujeron al español y la cantaron en la función oficial del 9 de Julio de 1945. Tal como sucedió en el estreno, el aria dedicada a la bandera recibió la ovación del público y ese mismo año fue incluida por decreto del Poder Ejecutivo dentro del conjunto de canciones patrias.

Panizza explicaría luego que eligió el nombre Aurora para su obra porque representa la aurora de mayo, el clarear de la libertad y el inicio de la patria, encarnados en una mujer que por amor abrazó los ideales revolucionarios.
 


¿SABÍAS QUÉ …?

• Aurora fue creada para exaltar los ideales patrióticos en vísperas de los festejos del centenario de la Revolución de Mayo



La bandera se empieza a hacer en el campo

La historia cuenta que un 27 de febrero de 1812 Manuel Belgrano enarboló por primera vez nuestra bandera en un poblado llamado Capilla del Rosario, hoy Rosario. Esta llevaba los mismos colores de la escarapela y fue confeccionada por María Carolina Echevarría y otras mujeres de la zona usando seda importada.

Para que las banderas flameen altivas bajo la lluvia, el viento o el sol, deben estar hechas con telas que duren mucho tiempo a la intemperie, manteniendo sus colores y siendo ligeras para moverse fluidamente con el viento, pero resistentes para que este no las rompa. Por eso, las más usadas son las telas de poliéster; siendo una de las más elegidas la seda de poliéster, también conocida como seda de forro (esa que encontramos en el interior de sacos y tapados). Su composición es una mezcla de poliéster y algodón.

Podríamos decir que el algodón que flamea en nuestras banderas es un “transgénico” natural. Gossypium hirsutum es la especie cultivada en nuestro país y proviene de un cruzamiento que ocurrió hace más de un millón de años entre dos especies de Gossypium, una con genoma A y otra con genoma D. Por supuesto, los hijos de este cruzamiento eran estériles porque al tener genomas diferentes la división celular y la formación de gametos (polen y óvulos) era imposible. Pero para la naturaleza hay pocas cosas imposibles y por medio de una mutación duplicó o diploidizó el número de cromosomas de esas plantas haciéndolas fértiles ¿Cómo? Equilibrando la paridad de cromosomas para formar gametos equilibrados.

Mucho tiempo ha pasado de aquel cruzamiento original y, con los avances de la ciencia, han sobrevenido muchos cruzamientos dirigidos por los fitomejoradores para obtener variedades resistentes a plagas y enfermedades, más productivas y con una calidad de fibra imbatible para que las telas duren más tiempo. Por supuesto que también usaron biotecnología para poner en el mercado cultivos transgénicos tolerantes a herbicidas y resistentes a insectos. Los insectos plaga desmejoran notablemente la calidad de la fibra, pero si la planta tiene incorporada la resistencia, el capullo de algodón queda intacto y se obtiene un producto de mayor calidad. Más recientemente están explorando la edición génica para otorgarle al cultivo de algodón otras características de interés.


¿SABÍAS QUÉ …?

• Casi todo el algodón que se siembra en Argentina es transgénico? Tiene características que lo diferencian del algodón convencional y un excelente desempeño en el campo 
• En Argentina los algodones transgénicos pueden ser resistentes a insectos (Bt), tolerantes a herbicidas o con ambas características combinadas (resistencia a insectos y tolerancia a herbicida). Esta combinación de rasgos se realiza por cruzamientos convencionales.
• El algodón resistente a insectos contribuye a reducir el número de aplicaciones de insecticidas necesarias para proteger al cultivo y mantener la calidad de las fibras producidas.



Semilla segura, algodón de calidad 

Semilla Segura es el nombre de un programa del ex Ministerio de Agricultura y que llevan a cabo el INASE, el SENASA e instituciones privadas para garantizar por un lado los derechos de obtentor para los mejoradores, y por otro para evitar el uso de materiales no autorizados y fomentar la siembra de semilla fiscalizada. Para implementarlo se realizan controles en las deslintadoras, lugar donde se procesan los granos para transformarlos en semilla de uso propio. Ahí, mediante diferentes pruebas, se puede detectar la variedad de la que proviene y qué eventos biotecnológicos tiene. Si se comprueba que dicho grano proviene de variedades no autorizadas para el comercio en Argentina, se impide la descarga y, por supuesto, el procesamiento.


LOS NÚMEROS DE SEMILLA SEGURA

• El 27% de los materiales ingresados al sistema tiene contaminación con eventos no autorizados
• El uso de semilla fiscalizada es del 50% para las últimas campañas


Todos los 20 de junio, recordá que en nuestra bandera hay agricultura e innovación. ¡Feliz día a nuestra hermosa bandera argentina!