Trigo, el rey de los cultivos de invierno

Con el invierno llegan el frío, los días cortos y en algunas zonas agrícolas argentinas la escasez de lluvia. El cultivo más importante adaptado a estas condiciones es el trigo. En los siguientes párrafos te contamos cuánta innovación hay en las plantas que darán origen al pan, los fideos, la carne y la leche que llegan a tu mesa.

14 siglos de compañerismo

En la actualidad asociamos la palabra pan con trigo, que es el cereal panadero por excelencia, pero el pan está etimológicamente ligado a la palabra compañero. Esta deriva del latín cumpanis (cum=con, panis=pan) y significa “aquel con el que se comparte el pan”, alimento que sospechábamos se había originado con el comienzo de la agricultura, hace más o menos 10 mil años. Sin embargo, parece que tribus de cazadores-recolectores del sudeste de Asia ya hacían harina de cereales silvestres en el período Natufiense y con ella panes sin levar.

 


¿Sabías que…?

Las Natufienses fueron comunidades preagrícolas que vivieron hace más de 14 mil años y pueden estudiarse a partir del yacimiento arqueológico Wadi-en-Natuf (de donde deriva el nombre), ubicado en Cisjordania.


 

No solo de pan vive el hombre

El trigo es originario de la zona conocida como Creciente Fértil, lo que actualmente es El Líbano, Israel, Siria, Irak, sudeste de Turquía y el noroeste de Jordania. Allí fue domesticado y dispersado a todo el mundo. Hay dos tipos de trigo cultivados: el trigo pan (Triticum aestivum) y el trigo candeal o trigo duro (Triticum durum). El primero se usa para panificados y pastelería y el segundo para la fabricación de pastas. No obstante estos usos del grano, la planta puede emplearse como forraje para el ganado, especialmente en aquellas zonas donde los inviernos son secos y otras pasturas no producen alimento suficiente.

Mejores trigos

La genética del trigo es complicada y por consiguiente lo es el fitomejoramiento. El trigo pan tiene tres genomas (AABBDD) y el trigo duro, dos (AABB). Ambos son descendientes del mismo progenitor (que les cedió el genoma AA), pero se cruzaron con diferentes especies (que proporcionaron los genomas BB y DD), evolucionando en dos especies distintas.

Para tener mejores variedades, un programa de fitomejoramiento consta, generalmente, de cinco pasos:

  1. Delineación del objetivo (características a mejorar)
  2. Identificación e incorporación de variabilidad genética (ver dónde están los genes que dan las características de interés e incorporarlos en las plantas del programa)
  3. Autofecundación de las plantas resultantes y selección de las que lleven las características deseadas
  4. Evaluación de las líneas seleccionadas (líneas élite)
  5. Inscripción de los nuevos cultivares (variedades)

¿Dónde buscan los mejoradores la variabilidad genética?

Los mejoradores de trigo tienen tres fuentes en las cuales pueden bucear para encontrar los genes de interés: líneas del propio programa de fitomejoramiento o de otros programas ubicados en áreas agroecológicas parecidas; líneas mejoradas, pero no adaptadas a la región de interés del programa y los parientes silvestres. Una cuarta fuente para buscar variabilidad es la inducción de mutaciones, aunque hasta ahora ha tenido moderado éxito debido a que, al tener más de un genoma, el trigo tiene múltiples copias de algunos genes y una mutación en una copia no afecta a las otras y por lo tanto, no produce el efecto esperado.

¿Cómo se hace la selección?

Una vez que se cruzaron dos plantas diferentes (la que se quiere mejorar con la que tiene la característica que se quiere incorporar) hay que seleccionar en la progenie (hijos) las plantas que continuarán en el programa y descartar las demás. Los fitomejoradores pueden seleccionar las plantas viendo directamente su comportamiento en el campo (selección por fenotipo o selección visual); por ejemplo, inoculándole una enfermedad y eligiendo solo las plantas sanas. Una manera indirecta para hacer la selección es usando marcadores moleculares. Estos son secuencias de ADN relacionadas con la característica de interés; por lo tanto, cuando la secuencia está presente (puede verse en un análisis de laboratorio) también estará la característica que se desea incorporar.

 


¿Sabías que…?

- De todas las líneas ensayadas en un programa de mejoramiento de trigo solo el 0,1% llega a los campos de los productores, el 99,9% se descarta

- Un programa de fitomejoramiento de trigo puede partir con 2 millones de plantas y descartar, en las primeras generaciones, 1.900.000

- Se necesitan entre 7-10 años para obtener una variedad de trigo y luego 4 años más para producir semilla certificada suficiente para comercializar

- En el RNC de INASE hay inscriptas 38 variedades de trigo duro y 400 de trigo pan


 

Revolución rima con mutación

A mitad del siglo XX, la producción de trigo no era suficiente para satisfacer las necesidades de la población mundial en crecimiento. A raíz de esto, en el año 1944 comenzó en México un programa de fitomejoramiento para obtener trigos de alto rendimiento y resistente a enfermedades. Este programa, dirigido por Norman Borlaug, obtuvo variedades resistentes a enfermedades que fueron cruzadas con la variedad enana Norin-10 para producir trigos semi-enanos, de alto rendimiento y resistente a enfermedades. La variedad Norin-10, de origen japonés, es enana debido a una mutación. Esta cualidad hace a las plantas resistentes al vuelco (no se caigan) y facilita la cosecha mecánica. Las nuevas variedades desarrolladas por Borlaug y su equipo dieron origen a la Revolución Verde, que permitió a países como India, Pakistán y China ser autosuficientes en la producción del cereal.


¿Sabías que…?

Norman Bourlag recibió el Premio Nobel de la Paz en el año 1970 por haber promovido la Revolución Verde. Sus esfuerzos en el mejoramiento de cultivos alimenticios y la posterior introducción en los campos de México, Pakistán e India provocaron un marcado incremento de la productividad agrícola y algunos lo consideran responsable de haber salvado más de 1.000 millones de vidas humanas.


 

Trigo híbrido

A partir de la década del 90 se comenzaron a comercializar, en EE.UU. y Europa, trigos híbridos. El interés de fitomejoradores y productores en contar con ellos es debido al mayor rendimiento y mejor calidad del grano. Debido a que el trigo es una planta que se autopoliniza, realizar cruzamientos para obtener híbridos con el objetivo de producir semilla es un proceso realmente difícil, pero se ha logrado gracias a los avances en genética, biotecnología y otras disciplinas en la que se apoyan los mejoradores.


¿Sabías que…?

- En Europa, el área sembrada con trigo híbrido pasó de 100 mil ha en el año 2002 a 500 mil ha en el año 2017

- En el RNC de INASE hay registradas 8 variedades de trigo pan híbridas


 

Mejoramiento de trigo en Argentina

El fitomejoramiento de trigo en nuestro país comenzó hace más de 100 años y para 1914 ya había selección de trigos “criollos” que se cultivaban y se había comenzado a realizar cruzamientos para generar variedades. En 1919, Enrique Klein fundó el primer criadero privado del país y un poco después se estableció el segundo, propiedad de otro alemán: José Buck. Ambas empresas siguen trabajando en la actualidad y lanzando variedades de trigo al mercado.

En los años 60 había varios planes de mejoramiento oficiales dispersos que se concentraron en el plan de mejoramiento del INTA y que desde entonces funciona como un único plan público organizado. En esta institución se realizó la introducción de líneas portadoras de genes de enanismo, además del establecimiento de laboratorios de calidad panadera, sanidad vegetal, tecnología genética y biotecnología. Actualmente, INTA tiene 11 cultivares de trigo pan y uno de trigo duro inscriptos en INASE.

En la campaña agrícola 19/20 se produjeron 19,5 millones de toneladas de trigo provenientes de variedades mejoradas, con lo cual podemos afirmar que con ciencia, tecnología e innovación ¡hay compañeros!

 

Imagen de presentación: Irena Carpaccio | Unsplash